Pero por mucho empeño que se ha puesto y se siga poniendo, jamás se inventara ningún utensilio capaz de superar a las manos del cocinero.
En ellas esta el sentido del tacto capaz de percibir sensaciones que jamás una maquina o un utensilio será capaz de percibir.
Os puedo asegurar por experiencia propia, que no hay nada más antinatural dentro del trabajo en una cocina que cocinar con guantes de látex, llenos de unos polvitos blancos que vete tu a saber que son, y que lógicamente acaban en los alimentos.
Mi llamamiento es para esas cabezas pensantes de grandes cadenas de restauración, catering, cocinas centrales:
Señores somos cocineros y no cirujanos, la mejor higiene es tener las manos cuidadas y bien limpias.
No pueden pretender tener cocineros mermados de uno de los sentidos fundamentales para realizar su trabajo EL TACTO.
Nota: Tras bastantes llamadas de atención de mi maestra en esto de los fogones "hijo mio, no hagas eso con las manos", todavía no ha conseguido convencerme de que siempre que puedo utilice las manos para cocinar y poder disfrutar del tacto de los alimentos.
Y a estas alturas lo veo tarea complicada
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